La decisión de la Alcaldía de Claudia López de implementar la política pública de movilidad motorizada de cero y bajas emisiones en Bogotá representa un cambio significativo en la forma en que se aborda la movilidad en la ciudad.
Esta iniciativa tiene como objetivo principal reducir el registro y la circulación de vehículos a gasolina en la capital colombiana. En los próximos años, no solo se prohibirá el registro de nuevos vehículos de combustión, sino que también se impondrán restricciones a la circulación de la mayoría de los vehículos existentes.
Óscar Julián Gómez, subsecretario de la política de movilidad, destacó la importancia de esta medida para hacer que todas las opciones de movilidad en Bogotá sean más respetuosas con el medio ambiente.
Se implementarán dos fases clave en la ejecución de esta política: primero, habrá restricciones en el registro de nuevos vehículos, y luego se establecerán restricciones a la circulación de vehículos existentes.
Es importante señalar que la venta de vehículos a combustión seguirá permitiéndose en Bogotá, pero estos deberán registrarse en otras ciudades del país y no podrán circular en la ciudad a partir de 2035.
A partir de ese año, solo se permitirá el registro de motocicletas y vehículos con cero o bajas emisiones, lo que significa que los vehículos a gasolina enfrentarán limitaciones en su movilidad en ciertas áreas de la ciudad o incluso en toda Bogotá.
*Con información de SEMANA.