Cúcuta es una ciudad que respira historia, cultura y resiliencia. Hoy, un nuevo impulso ciudadano busca transformar esa energía en una marca ciudad que inspire orgullo local y proyecte a la capital nortesantandereana con fuerza a nivel nacional e internacional: “Cúcuta, Ciudad de Colores”.
Una iniciativa con raíces en la esperanza
La propuesta es liderada por el gestor de Felicidad Juan Pablo Ordóñez, quien relata que la idea surgió de una experiencia personal de sanación, en la que los colores se convirtieron en un símbolo de vida y esperanza.
A partir de ese proceso nacieron actividades comunitarias que refuerzan la identidad cucuteña: los Desayunos de la Felicidad, las Galletas de Navidad y la entrega de más de 3.500 regalos a niños de asentamientos vulnerables.

El recuerdo de los árboles coloridos
Uno de los hitos más recordados ocurrió hace nueve años, cuando 285 árboles del centro de la ciudad fueron decorados con telas multicolores. Aquella intervención urbana convirtió el corazón de Cúcuta en una vitrina alegre y llamativa, reconocida tanto por propios como por visitantes.

Un propósito que va más allá del arte
Con el relanzamiento de “Cúcuta, Ciudad de Colores”, el objetivo es mucho más ambicioso:
Posicionar a la ciudad como el centro comercial a cielo abierto digital más grande del país.
Promover el turismo local e internacional.
Fortalecer la economía creativa.Y, sobre todo, generar un sentimiento de pertenencia y orgullo cucuteño.
Voces de inspiración
“La ciudad que soñamos es alegre, emprendedora y talentosa. Con orgullo la estamos pintando de colores para el mundo”,
—afirma Ordóñez.

Un movimiento que invita a todos
“Cúcuta, Ciudad de Colores” no es solo un lema: es una invitación a ver la ciudad con otros ojos, valorar lo propio y sumarse a un movimiento que celebra la vida, la diversidad y el talento de su gente.
📲 Síguela en Instagram: @cucutaciudadecolores












