El gobernador de Crimea, Sergei Aksenov, anunció este sábado que las fuerzas aéreas rusas habían derribado múltiples misiles ucranianos sobre el puente de Kerch, que conecta la península anexada por Moscú con la región rusa de Krasnodar. Simultáneamente, las autoridades de la región rusa de Belgorod informaron de la interceptación de un dron ucraniano.

Aksenov aseguró que el puente no sufrió daños significativos, aunque por razones de seguridad se cerró temporalmente la carretera.

Las autoridades instaron a la población a mantener la calma, según informó la agencia de noticias Interfax. Posteriormente, el Ministerio de Defensa de Rusia emitió un comunicado afirmando que Kiev había lanzado un ataque «terrorista» contra el puente de Kerch con un misil antiaéreo S-200. Señalaron que el sistema de defensa aérea ruso detectó e interceptó con éxito el misil ucraniano en el aire, sin causar víctimas ni daños materiales, según informó la agencia de noticias TASS. Poco después, se produjo un ataque similar con el mismo tipo de misil, pero nuevamente sin causar víctimas ni heridos.

El Ministerio de Defensa también denunció al menos veinte ataques de drones ucranianos contra sus posiciones en la península, así como otro ataque de un dron en la región rusa de Belgorod, cerca de la frontera con Ucrania. Estos ataques fueron igualmente neutralizados por los sistemas de defensa, según confirmó el gobernador Viacheslav Gladkov.

Hace apenas una semana, un ataque con drones submarinos ucranianos dañó un petrolero ruso llamado SIG, procedente de Turquía, a unos 51 kilómetros de distancia. Afortunadamente, no hubo heridos entre la tripulación.

En julio, un tramo del puente de Kerch fue atacado por varios drones en un incidente que resultó en dos muertes. Las autoridades rusas acusaron directamente a Ucrania por el ataque, mientras que desde Kiev argumentaron que se trataba de un ataque de bandera falsa perpetrado por Rusia.

*Con información de SEMANA.